*En el municipio de Solidaridad se reveló un entuerto como herencia económica que comprometerá gravemente el inicio de la nueva administración.
*Adicionalmente, la contratación de una deuda bancaria sin autorización del Congreso, ensombrese las finanzas que va a traspasar
ESPECIAL Callejo TV
Cancún, Quintana Roo. – Lili Campos, la presidenta muncipal saliente, usó la misma estrategia de su mentor, Carlos Joaquín, para hacerse de una holgura económica en el presupuesto, a costa de su padrón de proveedores, a los que no les pagó. Exactamente como hizo el ex gobernador al dejar el cargo.
De acuerdo con el documento filtrado por Radio Turquesa, Campos dejará una deuda clasificada como «otros pasivos» por un monto de 507 millones de pesos, una cifra superior a la deuda bancaria de largo plazo, que asciende a 468.5 millones de pesos. Esta deuda incluye principalmente compromisos a corto plazo, entre los que destacan:
+ Deudas con proveedores: 245 millones de pesos, reflejando una estrategia de postergación de pagos que recuerda a la utilizada por Carlos Joaquín González, mentor político de Campos.
+ Retenciones y contribuciones: Un pasivo de 85 millones de pesos, que implica obligaciones fiscales o salariales que no han sido cubiertas.
+ Otras cuentas por pagar: 56 millones de pesos, lo que sugiere un manejo deficiente de las obligaciones municipales.
Posibles consecuencias para la administración entrante:
El monto de los pasivos a corto plazo es crítico, ya que superar la deuda bancaria heredada genera una presión inmediata sobre el flujo de caja del municipio. Esta carga financiera puede:
+ Comprometer proyectos y servicios: Al iniciar con un déficit tan elevado, Estefanía Mercado podría verse obligada a destinar gran parte de su presupuesto a la liquidación de deudas en lugar de financiar nuevos proyectos o servicios esenciales para la comunidad.
+ Riesgo operativo: La magnitud de la deuda con proveedores puede poner en riesgo la capacidad del nuevo gobierno de adquirir bienes y servicios necesarios para su funcionamiento en los primeros meses de gestión.
Relaciones tensas: El proceso de entrega-recepción ha sido tenso debido a la reticencia del equipo de Campos a compartir la información financiera, lo que incrementa la sospecha de que esta deuda oculta fue intencionadamente manejada de manera opaca. Este hecho tensiona aún más las relaciones entre la administración saliente y la entrante, lo que podría derivar en una transición difícil.
Deuda bancaria refinanciada sin transparencia:
Otro punto preocupante es el refinanciamiento reciente de la deuda bancaria por parte del gobierno de Lili Campos, hecho sin consulta al Congreso ni con un proceso competitivo que permitiera mejores condiciones de mercado. Este movimiento financiero, realizado a puertas cerradas, añade un nivel de desconfianza en el manejo de las finanzas públicas, lo cual podría perjudicar a largo plazo la capacidad del gobierno para renegociar o encontrar soluciones a la deuda.
Conclusión:
La estrategia de Lili Campos, heredada de su mentor Carlos Joaquín González, de retrasar pagos a proveedores para aliviar tensiones financieras, ha dejado a Solidaridad con una deuda de corto plazo que pone en riesgo la gobernabilidad de la próxima administración. Estefanía Mercado enfrentará un panorama financiero lleno de desafíos, que requerirá una planificación exhaustiva y posiblemente la implementación de medidas de austeridad para restaurar la estabilidad financiera del municipio. La falta de transparencia en el proceso de refinanciamiento de la deuda bancaria y la opacidad en la entrega de información hacen que la situación sea aún más delicada.