DESTRIPACUENTOS
Por Antonio Callejo
Cancún, Quintana Roo. – Es obvio que a la gobernadora, Mara Lezama, le gustaría que su partido –Morena—y sus aliados, alcancen `carro completo´ en el venidero proceso electoral. Es decir, para ella sería presumible que ganen sus compañeros y compañeras de partido en los 11 municipios, así como en las 15 diputaciones de mayoría. Además, claro de las senadurías y diputaciones federales.
Sin embargo, no se puede replicar al pasado y a aquellos tiempos del PRI aplastante, porque hay matices.
El ayuntamiento de Solidaridad (con cabecera en Playa del Carmen), donde gobierna con las siglas del Frente (PAN-PRI-PRD), Lili Campos, representa una interrogante en el panorama electoral para el partido mayoritario.
Veamos:
En ese municipio hay una pulverización de los liderazgos. Hay que ubicar que Lili Campos tiene un trabajo muy denodado en términos de control de las bases panistas, así como de comités de colonias a los que da seguimiento, en un plan bien estructurado justamente para alcanzar su reelección.
Ahora bien, en las filas opositoras se encuentran líderes que, por si solos, no suman actualmente un bloque con unidad y cohesión para representar alguna opción muy competitiva.
La candidata natural de este municipio es la diputada del Verde, María José Osorio, quien se ha reportado lista en el caso de que sea llamada por Morena y el Verde. Se sabe que su equipo se siente capaz de allegar hasta 17 mil votos, que serían más de los que Morena y/o el PT son capaces de conseguir.
Sin embargo, recordemos que Lili Campos le ganó a Laura Beristain, de Morena, con poco más de 24 mil votos. La morenista quedó abajo por unos cuatro mil sufragios.
María José Osorio tiene además un margen de negociación con actores políticos agraviados o soslayados por el joaquinismo, como Román Quián, Gabriel Mendicutti, incluso Chano Toledo, entre otros, cada uno de ellos con cierta fuerza en la comunidad.
Tiene claramente María José Osorio la oportunidad de la reelección, y la ventaja de su juventud a favor. Puede esperar y ver perder a Estefanía Mercado. Una alianza entre ambas, hoy impensable. Adelante explicamos el por qué.
La otra eventual candidata, hoy también del Verde –pues fue pan-perredista en su momento–, es la citada legisladora local, Estafanía Mercado.
Sin embargo, en los últimos meses se enredó en una serie de desencuentros y desaguisados con cuadros dirigentes del Verde, incluido el líder estatal, Renán Sánchez, e incluso fue ubicada como la persona que orquestó algunos ataques mediáticos y `fuego amigo´, contra actores a quienes considera una competencia, como la misma María José Osorio. Su asesor principal, Miguel Ramón Martín Azueta, tampoco le abona mucho. Al contrario, le genera un halo cercano al joaquinismo. Hay demasiados agravios de su parte en el entorno.
Otros actores, como Arturo Castro, morenista de cepa, quien cuenta con experiencia y un perfil sólido como político, no han podido construir, sin embargo, sobre un partido que todavía practica el canibalismo fraterno, donde los desacuerdos son más frecuentes que las alianzas.
Esos son, por decir los más, aquellos políticos y políticas que podrían encarar a una Lili Campos bien plantada, que además cuenta con el aparato del gobierno y sabe qué hacer con él.
Ahora bien, ¿con quién ganaría realmente Mara Lezama? Aparentemente con Estefanía Mercado no. Y con María José Osorio tendría que llamar a la unidad a los morenistas, que son complicados.
En resumen, en Solidaridad (Playa del Carmen), se verá con claridad si a la gobernadora le interesa pintarlo de guinda, porque la operación para ganarle a Lili Campos debería ser contundente y notable. De otro modo, quizás vale más un esfuerzo menor para evitar desgastes innecesarios.
En las últimas reuniones en las que coincidió la gobernadora con Lili Campos, hubo deferencias de parte de Mara Lezama, que mandan un mensaje de más cordialidad.
Pero si, el desenlace electoral de Solidaridad es un misterio, por el momento.
@AntonioCallejo 13.11.2023